Eso es querer!

Amortiguador

Como una pera recibes las más fuertes caricias que su mano pueda brindarte. Las acoges con tanto gusto que corren lágrimas de gran emoción. Siempre tan agradecida gritas y te sorprendes, cuando tu pelo es soga o freno de la bestia, miras entonces estrellas en el aire con un brillo encantador. Repites hasta al cansancio - “yo te amo”, “jamás me apartaré de ti”, “que sería de nuestra vida sin ti”, “hago lo que me pidas, lo que quieras”-.

Frases tan profundas, cargadas de impresión que tan sólo van al  aire, no penetran en su reptil menos en su límbico tan infructuoso. Sólo generan una acción, llevarte hasta tu lecho, donde con el más extraño amor, sollozas, queriendo despertar sin haber dormido.

Un nuevo sol ha llegado, renaces. Ese, tu amor, te despierta tatuando un beso en el aire y esculpiendo un ‘te amo princesa’ en la sinergia de tus neuronas.

Avergonzada no sabes si salir o quedarte en casa. Lo has decidido, pero, los lentes oscuros, ni el maquillaje menos la ropa podrán ocultar la púrpura teñida en tu piel.

Amate nadie lo hará como tú misma, no merece aprecio quien no te estima y te respeta como mujer.       

  19/07/2010